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Fallece el legendario actor y humorista Jerry Lewis

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Washington, 20 ago (PL) El actor y humorista estadounidense Jerry Lewis, considerado uno de los cómicos más populares de su país a mediados de la cenleturia anterior, murió hoy a los 91 años, confirmó la oficina de su representante.

De acuerdo con medios de prensa, que citan importantes hitos de la carrera del artista nacido el 16 de marzo de 1926 en Newark, Nueva Jersey, la muerte se produjo en su casa en Las Vegas, Nevada.

Lewis perfeccionó el rol de tonto payaso en comedias visuales como The Nutty Professor (El profesor chiflado) y también ganó reconocimiento como escritor y filántropo, destacan las fuentes.

Recalcan que fue un artista completo, creador incansable de piezas de humor esencialmente visual y famoso por los esfuerzos para crear conciencia sobre la distrofia muscular y su icónica marca de comedia física.

A los 20 años de edad, en 1946, Lewis se unió al cantante Dean Martin en una de las sociedades más exitosas del entretenimiento, y en la actualidad los sketch de ambos, con muchas caídas, golpes y agua, son considerados clásicos.

Durante la siguiente década, protagonizaron numerosas películas cómicas y después del filme Hollywood o Bust hicieron su última aparición conjunta.

En más de medio siglo, sus obras audiovisuales recaudaron 800 millones de dólares, una cifra significativa teniendo en cuenta que los billetes de cine no costaban más de 50 centavos en el apogeo de la popularidad.

La salud de Lewis se quebrantó varias veces, sufrió infartos y fue diagnosticado con cáncer de próstata y diabetes, pero siguió trabajando, incluyendo una adaptación musical de El profesor chiflado, en 2011.

El año pasado regresó a la gran pantalla con un pequeño papel en el filme The Trust, en el cual apareció junto a los actores Nicolas Cage y Elijah Wood.

Reír o llorar. Las risas son lo nuestro. La gente no puede odiar cuando se está riendo, escribió Lewis en su libro The Total Filmmaker.

Comedia, humor, llámalo como prefieras, es a menudo la diferencia entre la cordura y la locura, la supervivencia y el desastre, incluso la muerte. Es la válvula de seguridad emocional del ser humano, apuntó.